El 11 de febrero se celebró el día de las niñas ymujeres en ciencia y tecnología, y lamentablemente en América Latina, las brechas digitales y científicas persisten, limitando las oportunidades de las mujeres y niñas en la región. A pesar de los avances tecnológicos, las mujeres siguen rezagadas en campos como la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM), así como en el acceso y uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Esta desigualdad no solo refleja las disparidades de género existentes, sino que también obstaculiza el desarrolloeconómico y la inclusión social. Para cerrar estas brechas, se necesitan políticas y programas centrados en la igualdad de género en STEM y TIC, que fomenten la participación de las mujeres en estos campos desde la educación hasta el empleo.El acceso a la tecnología es un derecho humano fundamental, y cerrar la brecha digital de género es responsabilidad de toda la sociedad. Para ello, es crucial ofrecer becas y oportunidades de capacitación en línea que permitan a las mujeres desarrollar habilidades digitales y científicas. Además, laincorporación de la creatividad en STEM, convirtiéndolo en STEAM, puede abrirnuevas oportunidades en campos como los videojuegos y las industrias creativas. Estos sectores representan un área de crecimiento significativo en América Latina y ofrecen posibilidades de empleo para mujeres jóvenes.
Algunos datos que ilustran esas diferencias:
En América Latina y el Caribe, el 45% de los investigadores son mujeres, pero sólo el 21% de las mujeres que trabajan en investigación y desarrollo se dedican a las ingenierías y la tecnología, frente al 58% de los hombres. En la región, el 77% de las mujeres utiliza internet, frente al 79% de los hombres, y el 86% de las mujeres tiene teléfono celular, frente al 88% de los hombres. Sin embargo, hay una brecha de género en el uso de internet para fines educativos, laborales y de participación ciudadana, así como en el acceso a servicios financieros digitales.
La brecha digital de género no solo afecta a lasmujeres adultas, sino también a lasniñas en América Latina. A pesar de losavances tecnológicos y la creciente demanda de habilidades digitales, muchas niñas enfrentan barreras para acceder a la educacióny oportunidades en el campo de la tecnología. El 27 % de las niñas entre 10 a 12 años jamás ha usado un dispositivoelectrónico y el 39% de las niñas en Ecuador mantiene una brechaeducativa profunda en tecnología en relación a los niños de su misma edad. La falta de acceso a tecnología y sobre todo contenidos educativos nosolo es un problema serio sino peligroso. El 92%de las páginas web dirigidas al abuso sexual o emocional a niñas no sonidentificadas por falta de conocimiento. Las oportunidades de las niñas de acceder a becas educativas, programas de inglés y certificaciones de escuela media y bachiller se reducen en un 28% y por lo tanto acceder a educación universitaria o inserción decae en un 39 % -basado en el estudio de Unicef 2020 sobre Niños en un MundoDigita
Para cerrar estas brechas, se requieren políticas públicas, y programas y medidas centradas en la igualdad de género en STEM yTIC, que fomenten y promuevan la participación de las niñas y las mujeres en estos campos, desde la educación hasta el mercado laboral.La tarea de cerrar las brechas de género en STEAM Y TIC es una responsabilidad de todos en la sociedad, en primer lugar el acceso a las tecnologías es un derecho humano, como lo es también tener las capacidades digitales que permitan a las niñas y mujeres puedan acceder a nuevas formas de capacitación en línea y de certificaciones en tecnología y ciencia que les permita ampliar sus opciones de empleabilidad incluso gracias al trabajo remoto fuera de las fronteras de su país. Por el lado del Gobierno es importante que: 1) los bachilleratos duales y los institutos técnicos tengan mallas curriculares adaptadas a las necesidad de empleo actuales y futuro, 2) que se construya nuevos institutos técnicos tomando ene cuenta la necesidadde productiidad pero tambiéen de cerrar las brechas de género y de inclusión social. Así también , se requiere que lesector privado invertan en cerrar las breechas de género en capacidades digitales, tecnología y ciencia.
También es importante hablar sobre las oportunidades que existen actualmente para
cerrar estas brechas de género. Un área que es interesante para fomentar el empleo de las mujeres en tecnología es en el sector de arte y juegos digitales, es cuando añadimos una A en el sector STEM pasando a STEAM. ¿Qué sucede cuando añadimos esa A a STEM? La “A” en STEM – STEAM representa a la creatividad ensu sentido más amplio y abarcador en un mundo en el que las ingenierías y la tecnología tienen un impacto social real, y las industrias creativas incorporan y utilizan a la tecnología, la ciencia y la inteligencia artificial como una cosa cotidiana.
Un caso interesante es el de la industria de los videojuegos, una que para 2019 concentraba US. 397 millones de consumidores jugadores sólo en América Latina y el Caribe, 48% de ellos mujeres. Sin embargo, sólo alrededor del 21% de losdesarrolladores de videojuegos en el mundo son mujeres, y 5% aproximadamente están en América del Sur. De acuerdo a un reciente artículo del BID titulado “10 años impulsadonla cultura y creatividad”, el potencial es real. La economía creativa o economía naranja ha experimentado un crecimiento notable en la última década, representando el 3% del PIB global y empleando a más de 48 millones de personas en todo el mundo, mayoritariamente mujeres y jóvenes menores de 30 años. América Latina no escapa de esta realidad: en la región las industrias creativas generan ingresos de US$124.000 millones, 2,2% del PIB regional y 1,9 millones de puestos de trabajo. El sector STEM no se queda atrás, está comprobado que los niveles de empleo, la calidad del empleo, y los salarios son mejores en el sector STEM que en otras
Por otro lado, la tecnología está cambiando los modelos de negocio y lademanda de habilidades en todos los sectores, incluido el cultural. Incorporar la digitalización a actividades culturales de museos, galerías y los sectores más tradicionales como la artesanía, por ejemplo, y en general a la economía naranja, maximizaría la venta de sus productos o servicios. La “alianza” entre arte y tecnología ya está en marcha con los llamados emprendimientos tecnocreativos que son compañías queusan la creatividad en combinación con las nuevas tecnologías en sus productos o servicios. Para 2019 un informe del BID y BID Lab ya contabilizaba al menos 50 emprendimientos en la región en los ámbitos de cultura, datos (AI, ML,loT, Blockchain), editorial, Fintech, juegos interactivos,música, servicios creativos, Nuevos medios, robótica, y Wearables
Por el otro las industrias creativas aportan a las STEM una perspectivaúnica y habilidades especializadas que pueden impulsar la innovación y el desarrollo tecnológico. Por ejemplo, el diseño de Experiencia de Usuario (UX) es esencial en el desarrollo de tecnología. Las habilidades de diseño de las industrias creativas contribuyen a la creación de interfaces de usuario intuitivas y atractivas.
La alianza entre arte y tecnología ya está en marcha, impulsando la innovación y el desarrollo tecnológico. Las industrias creativas aportan perspectivas únicas y habilidades especializadas que enriquecen el campo de STEM, promoviendo así la inclusión y la diversidad. Cerrando la brecha digital y científica de género, América Latina puede aprovechar todo su potencial para el crecimiento económico y el desarrollo sostenible. Es hora de actuar de manera conjunta, pública y privada, para asegurar un futuro equitativo y próspero para todas las mujeres y niñas en la región.
Es hora de actuar con determinación para empoderar amujeres y niñas en el campo de la tecnología y las ciencias en América Latina. Cerrar estas brechas no solo es una cuestión de justicia social, sino también una oportunidad para impulsar el desarrollo económico y la innovación en la región. Con políticas inclusivas, programas de capacitación y un enfoque en la creatividad podemos construir un futuro más equitativo y próspero para todas las personas.
