Políticas Públicas para Enfrentar la Recesión y Generar Empleo

En el complejo panorama actual de Ecuador, la necesidad de diseñar e implementar políticas públicas que no solo garanticen la seguridad ciudadana, sino que también promuevan el crecimiento económico y la prosperidad para todos, es fundamental. El derecho a la vida y a emprender en un entorno seguro es vital; sin embargo, no podemos perder de vista la imperante necesidad de generar empleo y revitalizar la economía del país.

El Desafío del Crecimiento Económico

Los datos económicos son alarmantes: el crecimiento real per cápita del Ecuador ha sido negativo en los últimos años. Este estancamiento ha llevado a una creciente preocupación entre los ciudadanos y empresarios. A pesar de los esfuerzos del presidente Daniel Noboa por impulsar el sector de la construcción mediante la reducción del IVA en insumos específicos, este motor económico sigue en estado crítico. La disminución de impuestos es un paso positivo, pero sin un impulso correspondiente a la demanda, los resultados siguen siendo decepcionantes. 

Además, el sector turístico, que históricamente ha sido una de nuestras principales fuentes de ingresos, ha sufrido un duro golpe. La percepción de inseguridad ha resultado en la pérdida de 100,000 turistas, lo que no solo afecta a las empresas del sector, sino que también repercute en la economía local y nacional. Sin un aumento en la llegada de turistas, muchas comunidades que dependen de este ingreso se ven en una situación precaria.

La Realidad del Mercado Laboral

Esta preocupación por la economía se refleja de manera crítica en el mercado laboral. La tasa de desempleo, aunque relevante, no captura la magnitud del problema, dado que más del 60% de la fuerza laboral se encuentra en la informalidad. Es crucial centrarse en el concepto de empleo pleno, que ha disminuido en los últimos años, ya que esta es una métrica más realista del bienestar laboral de la población. Aunque no podemos esperar que un gobierno en sus primeros meses solucione todos los problemas, hay políticas efectivas que pueden mitigar el deterioro económico y laboral que enfrentamos.

Recomendaciones para el Cambio

1. Acelerar la Contratación Pública   

La mejora en los ingresos fiscales del gobierno, gracias al incremento del IVA y la retención en empresas, debe ser utilizada para ejecutar obras públicas que generen empleo y estimulen la economía. Estas obras no solo crearían puestos de trabajo, sino que también mejorarían la infraestructura, un elemento crucial para la competitividad del país. La creación de una comisión de expertos en contratación pública podría ayudar a abordar las debilidades institucionales en la ejecución del presupuesto, optimizando así los recursos disponibles.

2. Recuperar el Turismo a Través de Campañas Internacionales

Las imágenes de violencia han dañado la imagen del Ecuador en el extranjero de manera significativa. Sin embargo, existen regiones con menores índices de criminalidad, como Cuenca, que pueden ser promocionadas como destinos seguros. Es fundamental establecer un acuerdo nacional para comunicar de manera efectiva nuestras problemáticas y las soluciones que se están implementando. Invertir en la recuperación del turismo es crucial no solo para la economía, sino también para la imagen internacional del país, que necesita ser reconstruida.

3. Fomentar Alianzas Público-Privadas

La implementación de alianzas estratégicas para proyectos de infraestructura es esencial para el desarrollo del país. Estas colaboraciones no solo impulsarán el sector de la construcción pública, sino que también traerán consigo empleo y competitividad. Fomentar un ambiente donde el sector privado pueda colaborar con el gobierno puede resultar en proyectos más eficaces y en la optimización de recursos.

4. Impulsar el Sector Minero  y de energías renovables

Las exportaciones mineras han crecido exponencialmente en los últimos años, convirtiéndose en un pilar fundamental de nuestra economía. Este crecimiento ha demostrado que el sector minero tiene el potencial de ser el nuevo motor económico del país. Es imperativo ordenar y transparentar este sector, invitando a empresas con experiencia global en sostenibilidad y tecnología avanzada. La regulación adecuada y la promoción de buenas prácticas en minería pueden transformar este sector en un verdadero generador de empleo y riqueza.

Existen incentivos recientemente creados para acelerar la generación de energía fotovoltaica y eólica, pero existen barreras burocráticas y falta de financiamiento que atender.

5. Estimular la Producción y Exportación de Alimentos y Servicios Tecnológicos

Ecuador cuenta con ventajas naturales para la producción de alimentos, lo que debería ser prioritario en nuestra agenda política. En una década, las exportaciones de camarón se han triplicado, superando incluso a las de banano. Este éxito debe servir de modelo para otros sectores. Las políticas destinadas a mejorar la logística y la transformación digital en las cadenas de valor son esenciales para aumentar nuestras exportaciones. Asimismo, la adopción de tecnologías como el 5G debe ser prioritaria, especialmente para las pequeñas y medianas empresas, que son el corazón de nuestra economía.

Es imposible que un gobierno de tan corto tiempo y que ya está en campaña electoral pueda implementar  estas u otras recomendaciones, pero lo importante es empezar, tener una hoja de ruta, monitorear y comunicar los avances.   Y los ecuatorianos también tenemos un rol, que es el consensuar este tipo de políticas y en las próximas elecciones exigir que los candidatos nos expliquen cuales son las alternativas de políticas que implementarían para mejorar el crecimiento inclusivo, la generación de empleo y oportunidades para el bienestar de todos los ecuatorianos.